PATERSON
Paterson
Jim Jarmusch, 2016
Paterson, New Jersey, es la ciudad del poeta William Carlos Williams (1883-1963). A ella dedicó un poema épico, dividido en cuatro partes y publicado en cinco volúmenes (1946-1958), donde “un hombre es una ciudad y para el poeta todas las ideas están en las cosas”. Conocemos la obsesión de Jim Jarmusch por el eterno retorno y las estrucutras circulares. Su última película, Paterson, que empieza y termina con el mismo plano –el del poeta y su musa observados cenitalmente al despertar cada mañana– no es una adaptación del poema Paterson, pero en ella el hombre es también la ciudad, un poeta llamado Paterson, un chófer de autobús (un driver intepretado por Adam Driver, como si fuera un chiste interno) que encuentra sus ideas y sus versos en la apariencia de las cosas: una caja de cerillas, la lluvia, el amor… El legado de Williams, retratista mayor de América, es la inspiración latente y aludida de las imágenes de esta obra maestra, la más perfecta y hermosa de Jarmusch. “El rigor de la belleza es la búsqueda”, escribió Williams en el prefacio de su oda.